Geografía

Padrenda es un municipio montañoso, marcado por la transición de un paisaje agreste, que culmina en Pena Rubia a 1.227 metros de altitud, con el descenso paulatino hacia los valles de los ríos Deva y Miño. Esta especial configuración ofrece numerosos recursos naturales de gran belleza paisajística. Las laderas de las montañas se cubren de una espesa vegetación de coníferas, frondosas y prados mientras que los cultivos tienen que adaptarse en bancales. Los ríos y arroyos que drenan el término son numerosos: río Deva, río Grande, Troncoso y Crespos, todos tributarios del Miño, que se remansa en el embalse de Freiría. Los amantes de la pesca pueden disfrutar de cotos trucheros en los ríos Troncoso y Gorgua. También se puede practicar la caza, ya que abundan las especies como el conejo, la perdíz e incluso el jabalí.
Los restos arqueológicos encontrados indican que el municipio tuvo una temprana ocupación. Los vestigios más antiguos son las Mámoas de Bandexa», la cultura castreña ha dejado sus huellas en los castros de Desteriz, Monterredondo y A Torre. De la ocupación romana se han encontrado restos de explotaciones mineras y dos aras, una de ellas en la iglesia de Santa María do Condado. En las proximidades de este templo se hallaba un hospital de peregrinos que procedentes de Portugal utilizaron las calzadas romanas para llegar a Compostela. De su pasado medieval quedan los restos de las fortificaciones de O Castelo y Desteriz. En arquitectura religiosa cuenta con iglesias construidas en su mayoría entre los siglos XVIII y XIX, así como diversos cruceiros y petos de ánimas. La arquitectura civil se complementa con los pazos de Coucieiro y Regueiro.